El jugador ya había tenido problemas durante el mundial

Shern “Shernfire” Tai, exjungla del equipo oceánico Dire Wolves, anunció a través de su cuenta de Twitter los motivos de su ausencia en All-Star 2018.

En el escrito, el jugador cuenta que los últimos 2 años han sido una experiencia extraordinaria y agradece las oportunidades que le dio jugar League of Legends. Pero, al mismo tiempo, comenta sobre las ofertas que negó por mantenerse vigente en la escena competitiva.

Shernfire confiesa que, durante estos años, evitó enfocarse como debería en su salud mental, pero que ahora esos problemas son su prioridad. El jugador no solo se está dando de baja de All-Star, sino que también está dejando el competitivo de League of Legends.

El jugador australiano ya había tenido problemas de comportamiento previo al inicio de Worlds 2018, donde fue sancionado por comportamiento tóxico y perjudicó las posibilidades de su equipo en la competencia.

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Riot Oceanía fue pionero en dedicar parte de su equipo de trabajo a la salud mental de sus jugadores, a través de alianzas con organismos que se dedican a estos temas, pero no alcanza. Visto y considerando que cada vez es mayor la cantidad de jugadores que confiesan tener este tipo de problemáticas, Riot Games debería comenzar a tomar acción de forma más directa.

El ambiente competitivo puede ser muy estresante, sobre todo para jugadores tan jóvenes que aún están formando su personalidad. La presión de una organización que tiene sus intereses, los fans que esperan siempre un triunfo y Riot obligándolos a ser modelos de comportamiento son algunas de las cosas que están llevando a los jugadores profesionales a estos niveles de estrés.

La empresa, junto con los equipos, deberían hacer algo por este asunto antes de que sea tarde y el problema sea mayor. Nadie quiere que ocurra algo peor, ¿no?

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