No se pudo
La jornada del primero de mayo fue un cáos para el tiburón. Habiendo conseguido solo una victoria en 4 partidas jugadas, Isurus llegaba al día de hoy con una triste esperanza matemática, pero lejos de depender de ellos mismos. Para lograr la clasificación, Isurus tendría que ganar sus 2 partidas de hoy, y esperar a que todos los resultados se den de forma tal que terminara con un cuádruple empate. Era imposible.
Pero para depender de los resultados ajenos, primero hay que obtener los propios, y al tiburón le tocaba debutar en la jornada de hoy contra los locales, Phong Vū Buffalo. El día de ayer, los locales habían conseguido una victoria muy sobrada contra el representante de nuestra región, y siguen siendo grandes candidatos a quedarse con el liderazgo del grupo. El panorama era, en un inicio, difícil. Isurus había logrado cerrar el día de ayer con un triunfo sobre el equipo turco, pero la diferencia entre estos y los de Vietnam es evidente.
El juego fue, de principio a fin, para PVB, que no tuvo piedad sobre el tiburón y no dejó pasar una oportunidad de aplastarlo. El juego de los vietnamitas es sofocante y, por cada error, Isurus pagó el triple del precio que pagaría en Latinoamérica. La diferencia entre los equipos, sumado a los nervios normales de quien no depende de sí mismo para clasificar, terminó sepultando las posibilidades. Luego de un Barón en el minuto 21 y de algunas oleadas de empuje en el carril central, PVB logró cerrar el juego y está prácticamente en la próxima fase.
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Isurus tendrá que volver a Latinoamérica y pensar qué puede hacer para que esta historia no se repita en el próximo torneo internacional. Se acabó el sueño para la región.
