Con un 3-1, Primate venció a Furious Gaming en la serie final y se coronó como el primer campeón de la LRS.

El competitivo profesional de League of Legends para la segunda división vivió una fecha histórica con la final de la Liga Regional Sur que tuvo a los dos mejores equipos de la liga dejándose todo por conseguir el título. Primate se impone a Furious Gaming en una emocionante serie por 3-1 para convertirse en el primer campeón de la LRS.

Primate fue uno de los equipos más dominantes de la fase regular de la LRS y en los playoffs mantuvo su control, siendo el primero en meterse en la final. Por su parte, Furious Gaming estuvo persiguiendo a la Manada durante todo el split, terminando segundo en la tabla de posiciones. La Calavera no pudo plantar cara en una serie al mejor de cinco que se disputó en Tecnópolis, Buenos Aires.

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Furious Gaming comenzó de mejor manera el primer encuentro, consiguiendo un muy buen control de mapa con Camilo «Camilonicolau» Nicolau activo en los primeros minutos que le permitió sacar ventaja en objetivos. Sin embargo, Primate supo responder con un estilo agresivo sumando bajo que inclinó el marcador de oro a su favor. La Calavera logró recuperarse planteando peleas por equipos en torno al Dragón y el Barón, que le permitieron presionar por la línea superior y sellaron el primer punto a su favor.

Para el segundo juego, el inicio estuvo lento, con ambos equipos centrados en cosechar súbditos y buscando las batallas necesarias en torno a los objetivos. Si bien tuvo un comienzo igualado, Primate pudo ejecutar su composición de mejor manera, sumando bajas con Nicolás «Kz» Gutiérrez como principal pieza de su ofensiva. La Manada obligó a su rival a tener que pelear por el Barón Nashor buscando recuperarse y aunque por momentos parecía que la Calavera lograría sacar la pelea por el objetivo, una vez más el tirador del conjunto fue clave para que su escuadra sentenciara su primer punto.

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El tercer mapa de la serie fue un ida y vuelta desde el juego temprano, con ambos equipos controlando el enfrentamiento de a momentos, siendo la partida más igualada de toda la serie. Las peleas por equipo no lograban romper el marcador a favor de alguno, pero Primate logró quedarse con el Alma del dragón. Furious Gaming supo mantenerse en pie alargando el enfrentamiento. Ya en el minuto 50, la diferencia de oro no importaba y con las dos escuadras centradas en poner fin a la partida, la Manada supo buscar una pelea en la zona de la jungla que le permitió ponerse a punto del campeonato.

Ya en el último encuentro de la serie, Primate controló el juego temprano, manejando mejor el mapa para quedarse con los primeros objetivos del enfrentamiento. Furious Gaming no pudo responder a las peleas que planteaba su rival, que aprovechó los recursos que consiguió en el arranque para hacer un efecto de bola de nieves, aumentando la diferencia en oro. La Calavera, contra las cuerdas, buscó el Barón Nashor para alargar la partida y dar tiempo a que su composición escalara, pero terminó cediendo más bajas. La Manada con la bonificación en su poder, presionó un último empuje que le dio la victoria.

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