La organización que sirvió para llevar jugadores latinoamericanos a la escena norteamericana de CS:GO cerró sus puertas de forma sorpresiva
A pesar de que estamos acostumbrados a que los equipos latinoamericanos de esports sean volátiles, cuando se anunció la creación de Miami Flamingos —ahora Doral Flamingos— en diciembre de 2016, pensamos que esos días iban a terminar.
Lamentablemente, la organización de Doral decidió ponerle un fin sorpresivo a sus acciones tras el anuncio de Hugo “Rew4z” Cáceres a través de Twitter. Ahí confirmó que no iban a viajar a Estados Unidos, a pesar de haber armado una nueva alineación un mes antes.
Las noticias surgen a raíz de un audio filtrado, donde uno de los 4 inversionistas dice que Cougar —patrocinador— decidió no renovar el contrato con los Flamingos. También se menciona que “los jugadores perdieron la final cuando estaban acá, con el ping maravilloso” y cierra su explicación con: “Para qué querés que siga invirtiendo $6,000 USD al mes si con ese dinero pago la universidad de mi hija”.
El receptor de este audio fue el manager general de Flamingos, Lucas Noya. Son muchos los rumores que indican que la dirigencia no estaba muy conforme con el desempeño del exdueño de Guerreros del Mouse. Así pues, tras perder la final de ESEA Open, los inversionistas decidieron descontinuar al equipo.
Lo que sorprende en este caso es que Miami Flamingos nunca fue comunicativo cuando se trató de dar noticias negativas. Hasta que decidieron dar un comunicado por lo sucedido entre Gabriel “1962” Sinopoli y José “Linkz” Ortega, Rew4z se convirtió en el vocero oficial del equipo, recibiendo todas las críticas de la desvinculación de Linkz. Mientras tano, el comunicado oficial de los Flamingos llegó un mes después.
Desde un inicio, el equipo estuvo envuelto en varias situaciones irregulares. Sus jugadores originales decidieron abandonarlos debido a promesas incumplidas y retenciones salariales que nunca estuvieron justificadas. Existe una versión que indica que se redujo por mal desempeño, pero fuentes internas aseguran que el salario disminuyó apenas llegaron a Miami. A pesar de que el primer plantel generaba una cantidad de 3,000 a 7,000 espectadores concurrentes en sus respectivos partidos, todos los fanáticos decidieron acompañar al equipo en su transferencia a Gale Force Esports. Esto causó que, para el segundo equipo, las visualizaciones no superaran las 1,000 personas. Esta baja se dio también porque se confirmó que la escuadra de Doral nunca pagó los sueldos correspondientes a julio, deuda que se mantiene hasta el día de hoy.
El segundo equipo de Miami Flamingos no la tuvo fácil. Debido a la desconfianza de los inversionistas, entraron con sueldos más bajos que el equipo anterior. Incluso fuentes internas indican que Lucas Noya les retuvo dinero destinado a la comida cuando incorporaron el plantel de PlayerUnknown’s Battlegrounds. Además, luego de la clasificación del equipo a IEM Oakland, el plantel de CS:GO quedó completamente relegado, raspando la olla para poder alimentarse.
Por si fuera poco, al principio de sus partidos los jugadores sufrieron múltiples ataques DDoS que imposibilitaban su desempeño normal. La organización demoró meses en solucionar este inconveniente.
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Quizá el episodio emblema de esta segunda edición fue la discusión entre 1962 y Linkz, donde ambos discutieron e incluso casi llegaron a pegarse entre sí. Esto fue fruto no solo de la mala comunicación, sino de todos los factores externos que ayudaron a desgastar la relación entre los jugadores.
Hoy Miami Flamingos dejó de existir, pero sirvió para abrirle las puertas a los equipos latinoamericanos de CS:GO en Norteamérica, y demostrar que esta región tiene nivel. Sin embargo, sufrió del malestar del sur: falta de planificación, de contención y algunos personajes que prefirieron llenar sus bolsillos antes de apostar a la inversión a largo plazo.
Por el momento, Lucas Noya anunció a través de Twitter que Flamingos seguirá vivo operando desde Argentina. Es decir, no será el final del equipo que alguna vez generó ilusiones y, lamentablemente, se encargó de sepultarlas.
