La Liga Latinoamérica de LoL dirá adiós en 2025, una decisión que podría venir junto con grandes consecuencia e inconvenientes para la región.
La reciente disolución de la Liga Latinoamérica (LLA) y su unificación con la LCS y la CBLoL ha generado un torbellino de opiniones. Si bien es cierto que un cambio era necesario, la forma en que se ha llevado a cabo ha planteado preocupaciones válidas.
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La desaparición de la LLA no solo ha dejará a muchos profesionales sin trabajo, sino que también ha cortado el camino para que los nuevos talentos emergentes se desarrollen en el ámbito de los esports. Con menos espacios disponibles para competir al más alto nivel, es probable que veamos una disminución en el número de jugadores dispuestos a dedicar su vida a alcanzar la excelencia profesional en los esports.

Además, la reducción de equipos en la CBLoL de 10 a 6 ha sido recibida con críticas. La liga brasileña, conocida por su impresionante seguimiento y números de audiencia, ha demostrado ser un producto exitoso incluso frente a resultados internacionales desfavorables. Esta decisión no solo ha sido vista por muchos como una medida injusta, sino que también podría perjudicar a un producto que estaba funcionando bien.
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Aunque la intención de reformar la LLA puede haber sido positiva, las consecuencias de su eliminación plantean serias dudas sobre la viabilidad futura de los esports en la región. La comunidad espera que Riot Games tome medidas para mitigar estos efectos. Encontrar un camino que fomente el crecimiento y el desarrollo de los esports en Latinoamérica será fundamental para el futuro.
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