Las organizaciones más importantes de Argentina se pronunciaron en favor de garantizar una mejor escena, a raíz del caso de Piantaos Gaming.
Actualización:
Temporada de Juegos rectificó su comunicado y explicó que no hubo poaching en el caso de Piantaos Gaming. Además, aprovechó para desarrollar sobre su postura:
«Sin perjuicio de la decisión tomada, la cual no implica sanción alguna, el equipo en cuestión ha presentado un nuevo roster, y por tal motivo el roster anterior no participará del inicio del torneo, pero sí podrá hacerlo en adelante sin ningún tipo de sanción».
Aquí puedes leer el nuevo comunicado oficial.
Nota original:
En la mañana del 22 de agosto, 9z, Furious Gaming, Isurus y Malvinas Gaming hicieron un comunicado en conjunto sobre el caso Piantaos Gaming. El cuarteto reforzó su compromiso con el desarrollo de la escena argentina de esports. Al mismo tiempo, anunció la creación de lineamientos básicos para que organizaciones nuevas los sigan y eviten malas prácticas.
Para poner en contexto, Piantaos Gaming era una organización argentina enfocada en Counter-Strike: Global Offensive. Sin embargo, fue descalificada tanto de los torneos de FiReSPORTS como de los de Temporada de Juegos. La última mencionada comunicó que la decisión fue tomada por situaciones similares a poaching. Es decir, cuando una organización intenta comprar jugadores de otra sin aviso previo.
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A raíz de los acontecimientos con @PiantaosGaming, queremos anunciarles que su slot pasará a ser utilizado por el tercer colocado en el Open Qualifier de la #FiReLEAGUE Cluster Sur, a realizarse este sábado 22/08 a partir de las 14.00 hs (-3 GMT).
Que siga el Tango 🎩
— FiReSPORTS 🔥 (@lafireleague) August 22, 2020
En consecuencia, el exequipo de Piantaos Gaming no podía unirse a los clubes participantes de Temporada de Juegos. Además, la organización estaba obligada a conseguir un nuevo roster a la brevedad para no perder su cupo en los torneos. El poaching es severamente penado por organizaciones de deportes tradicionales y electrónicos, por lo que la solución no sorprendía.
Figuras como Rodrigo «Onur» Dalmagro no tardaron en señalar no había poaching porque hacía falta un contrato escrito. Esto va de la mano con el comunicado público de Patricio «Patt» Cataccio, dueño del equipo. Ahí se habla de un contrato apalabrado entre jugadores y organización, con base en los artículos 949, 957, 958 y 961 del Código Civil y Comercial de Argentina.
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#Comunicado
Después de más de dos años en la escena esports @PiantaosGaming cesa todas sus actividades a partir de hoy.Un agradecimiento infinito a todos a todos los que pasaron por esta casa deportiva y especialmente a ti tanguero por estos momentos inolvidables. pic.twitter.com/zC2mySliXb
— Piantaos Gaming 🎩 (@PiantaosGaming) August 21, 2020
En general, Patt argumenta que Piantaos Gaming tenía un contrato apalabrado, pero buscaba hacerlo oficial ante la ley. Según él, la idea fue aplazándose porque los jugadores querían esperar a un quinto jugador fijo para firmar. Pero cuando Piantaos Gaming fichó su última pieza, el equipo cambió de organización.
La situación continuó escalando cuando Joaquín Irala se descargó en redes sociales. En la publicación, se habla de pagos atrasados y la ausencia de un contrato escrito que ya se había solicitado en repetidas ocasiones. Sobre el porqué ficharon con otro equipo, Irala comenta que los chicos habían hablado con Piantaos Gaming y consiguieron un nuevo conjunto para el equipo. Además, comenta que era una gran oportunidad para los jóvenes jugadores.
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Saltamos al presente. Con todo lo que aconteció en los últimos días los equipos argentinos buscan establecer lineamientos que organizaciones puedan seguir. Esto a manejar de hoja de ruta para evitar más casos como el Piantaos Gaming en la región. La decisión va respaldada por el historial y renombre que tienen en la escena local de los esports.
De momento, no se ha hecho oficial la hoja de ruta, pero se espera que lleguen dentro de los próximos días. Como siempre, se busca cortar «de raíz con las malas prácticas naturalizadas entre los actores de este ecosistema».