La vida de nuestro querido Faker será muy distinta en unos años
El año es 2063, Lee Sang-Hyeok está sentado en su oficina en el último piso del edificio de T1 en Seul. De fondo, se escucha el relato de una televisión prendida con la LCK. Lee levanta la vista y una sonrisa se esboza tímidamente al ver la pantalla, la nostalgia de sus días de gloria lo inundan y por un momento, abandona su trabajo de oficina para levantarse a observar detenidamente el encuentro que se está jugando en la televisión.
De improvisto, su joven asistente abre la puerta. Al ver al CEO de la compañía absorto en la televisión admirando con ojos brillantes entre las arrugas que abundan en su rostro, no puede evitar preguntarle.
«Perdón por la pregunta, Señor Lee, ¿alguna vez jugó videojuegos cuando era joven? ¿Fue bueno en alguno?»
Lee desvía la mirada de la televisión y mira fijamente a su asistente, con ojos vidriosos y una amplia sonrisa le responde «sí, y sigo amando los videojuegos como el primer día»
Su asistente sonríe de vuelta y al retirarse de la oficina, es interrumpido por el CEO, «hey, chico… puedes decirme Faker.»
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La noticia de Faker firmando por tres años con T1 y convirtiendose en co-dueño de T1 Entertainment & Sports nos hizo imaginar un poco de cómo será el futuro del jugador. En su acuerdo, ya tiene asegurado un puesto de liderazgo para su retiro, cuando quiera que eso suceda.
En las noticias de hoy, Faker sigue y seguirá por un tiempo jugando para T1 y luchando por obtener su cuarto título mundial y escribiendo otra hoja de su legado en la historia de League of Legends.
